1.1.
La Trata Y Tráfico De Personas
La trata y tráfico de personas es un problema
inherente a la decadencia y degeneración del sistema social en que la actual
sociedad mundial se desenvuelve.
El capitalismo, como modo de vida de la actual
sociedad ha entrado en una crisis profunda y estructural debido a la
centralización de la riqueza en unas cuantas manos sumiendo al resto de la
sociedad en una insuperable situación de miseria. Este modo de vida de la
sociedad humana, cuyo rasgo es la explotación del hombre sobre el hombre, no
solamente ha entrado en crisis en términos económicos, sino que la crisis
económica ha permeado a toda la súper estructura de la sociedad como una crisis
de valores, una crisis donde los valores éticos han dejado de ser los móviles
por los cuales las personas se relacionan, y las relaciones de cambio y
obtención de ganancia han sometido a todos los valores incluyendo el de la
integridad y la dignidad humana. Sin esta crisis estructural del capitalismo,
no sería posible entender que este fenómeno, que se desarrolló a lo largo de la
historia del modo capitalista de producción, hoy día tenga tanto impacto tan
crítico sobre la sociedad.
1.2. La
trata y tráfico, definiciones conceptuales
La trata y tráfico son conceptos totalmente
distintos. Pues el primero hace tiene que ver con utilizar mecanismos
persuasivos o violentos para el traslado de personas con fines de explotación.
En tanto el concepto de tráfico de personas consiste en un vínculo mediante el
cual una persona traslada personas de un país a otro, terminando su trabajo
cuando la persona traficada llega a su lugar de destino.
La definición conceptual de trata de personas
según el “Protocolo de Palermo” o el “Protocolo de la trata” establece que la
trata de personas hace referencia a la captación, el traslado y la acogida de
personas con la finalidad de explotarlas de distintas formas.
a)
Por trata de personas se entenderá la
captación, el transporte, el traslado, la acogida o la recepción de personas, recurriendo
ala amenaza o al uso de la fuerza o
otras de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una
situación de vulnerabilidad o a la
concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de
una persona que tenga autoridad sobre otra, con fines de explotación.
b)
Esa explotación incluirá, como mínimo, la explotación de la
prostitución ajena u otras formas de
explotación sexual, los trabajos o servicios forzados, la esclavitud o las practicas
análogas a la esclavitud, la servidumbre
o la extracción de órganos.
c)
El consentimiento dado por la victima de trata
de personas a toda forma de explotación que se tenga la intención de realizar
descrita en el apartado a) del presente
artículo no se tendrá en cuenta cuando se haya recurrido a cualquiera de los
medios enunciados en dicho apartado;
d)
La captación, el transporte. El traslado, la
acogida o la recepción de un niño con fines de explotación se considera “trata
de personas” e incluso cuando no se recurra a ninguno de los medios enunciados
en el apartado a) del presente artículo.
e)
Por niño se entenderá toda persona menor de 18
años.
Es importante resaltar que la definición del
“Protocolo de Palermo” toma en cuenta como trata de personas al hecho de
captar, trasladar y recepcionar personas con fines de explotación. No
importando si la víctima está de acuerdo o da su consentimiento para dicho
delito.
Un aspecto con el que es necesario discrepar de
la presente definición es que la trata de personas se da bajo la finalidad de
la explotación. La presente definición aclara que se puede prescindir de los
métodos de trata, e incluso la persona puede estar de acuerdo, sin embargo el
rasgo característico que define a la trata de personas es la explotación. Esto
supondría, de asumirlo como tal, que la explotación solamente se da con la
trata de personas y no en las otras actividades de la vida productiva de la
sociedad, donde es innegable el hecho de la explotación del hombre.
La actual sociedad capitalista está asentada en
la explotación del hombre. Lo que el capitalista explota es la fuerza de
trabajo, que se presenta como una mercancía en el mercado que se puede comprar
y vender libremente. La fuerza de trabajo es reclutada por el capitalista quien
la emplea para poder realizar el proceso de trabajo, la mercancía fuerza de
trabajo actúa sobre su objeto de trabajo mediante instrumentos de trabajo para
transformarlo y convertirlo en una mercancía. El hecho está en que la fuerza de
trabajo, en el proceso de trabajo genera más valor del que cuesta y este
excedente es apropiado por el capitalista. Ahí se da la explotación, en la
apropiación del valor excedentario que el trabajador produce. Este fenómeno de
apropiación de la plusvalía es lo que define al capitalismo, ya que la lucha de
clases, gira en última instancia, en la apropiación o la distribución de tal excedente. Este
hecho es innegable y se da bajo todas las formas económico-sociales que
conviven con el capitalismo.
El problema de esta realidad intrínseca al
capitalismo como es la explotación, parece negarse cuando se habla de la trata
de personas, pues la explotación aparece como un fenómeno reciente que se da
solamente bajo las condiciones que establecen los tratantes a las personas
víctimas. Se podría decir que quienes plantean tal definición pasaran por alto,
el hecho de que en la sociedad actual, las clases trabajadoras y asalariadas no
viven la explotación del capitalismo, pues la trata de personas, debería
considerarse como una variante más de esta explotación, con el único rasgo diferencial
de que a las personas se las somete a una serie de condiciones violentas de
explotación, donde pierde toda la libertad de elegir libremente quien le va a
explotar. La trata de personas llegaría a ser una de las realidades más crudas
del actual modo de vida de la sociedad y al mismo tiempo el factor que con más
fuerza lo denuncia.
La definición del “Protocolo de Palermo” ha
logrado permearse a casi todas las definiciones en las legislaciones de los
países latinoamericanos. Al respecto la legislación nacional, en la Ley 3325 de
Trata y Tráfico de personas y otros delitos relacionados define la trata de personas en el mismo sentido que
dicho protocolo.
[…] el
que[1]
por cualquier medio de engaño, coacción, amenaza, uso de la fuerza y/o de una
situación de vulnerabilidad, aunque medie el consentimiento de la víctima, por
si o por tercera persona induzca, realice o favorezca el traslado o reclutamiento, privación de libertad,
reguardo o recepción de seres humanos, dentro o fuera del territorio nacional con
cualquiera de los siguientes fines:
a)
Venta
u otros actos de lucro
b)
Venta
ilegal de órganos, tejidos, células o líquidos corporales
c)
Guarda
o tenencia ilegales
d)
Explotación
sexual comercial
e)
Explotación
laboral
f)
Matrimonio
servil
g)
Toda
otra forma de explotación en actividades ilegales[2]
El que realice esta actividad comete el delito
de trata de personas. El rasgo de la definición de la ley 3325 con respecto a
lo establecido en el “Protocolo de Palermo” está en que se incluye el hecho de
la privación de la libertad de la persona. Este detalle permite entender—si
bien no descubre la raíz del problema—cuál es el rasgo que define a la trata de
personas ya que el rasgo diferencial de la trata de personas, es que la víctima
que se convierte en una mercancía, en el sentido estricto del términos, deja de
tener la libertad de elegir a su verdugo para su explotación y la libertad de
la persona se encuentra ahora en poder el tratante quien le obliga a trabajar
bajo condiciones lamentables y paupérrimas.
Esto permite cuestionar el hecho de que la
explotación se da solamente en la trata de personas. Dicha afirmación se
constituye en un encubrimiento del capitalismo, como un modo de producción
basado en la explotación del trabajador y de los otros estratos sociales que de
una u otra forma son subsumidos por el capital. Si llegamos a la esencia del
problema descubriremos que éste—la privación de la libertad de la persona, ya
sea por medios violentos o psicológicos—factor explica y describe a cabalidad
el fenómeno, por lo cual llegar a explicarlo ya no será un trabajo difícil.
El otro aspecto a remarcar es que la persona ha
dejado de ser tal, hay un proceso último de despersonalización, pues con la
trata de personas las mismas dejan de ser tal para transformarse en mercancías,
en cosas que satisfacen necesidades y que se pueden comprar y vender en el
mercado. Las personas se empiezan a concebir entonces como objetos que tienen
ciertas utilidades para ser vendidos en el mercado, a pesar de que no haya
salido de un proceso productivo, sino de un proceso de producción y
reproducción biológica y social. La actual sociedad, las familias pobres no
solamente reproducen biológicamente al trabajador del futuro, sino a mercancías
que se venden y se compran sin el menor reparo moral. Esta es la cumbre a la
que ha llegado la acción racional con arreglo a fines de la cual nos hablaba
Weber.
El tráfico de personas se diferencia de la
trata de personas cualitativamente. El único rasgo en común que pueden poseer
consiste en el traslado de personas o grupos humanos con respecto de un lugar
de origen a uno de llegada. “La facilitación de la entrada ilegal de una
persona en un Estado Parte del cual dicha persona no sea nacional o residente
permanente, con el fin de obtener, directa o indirectamente un beneficio
financiero u otro beneficio de orden material”[3]
es conocido como tráfico ilícito de migrantes. En esto consiste el tráfico de
personas, pues en este delito no se priva de la libertad a nadie simplemente le
permite moverse o desplazarse debido a las barreras migratorias que imponen los
países desarrollados a los países pobres.
CUADRO N°1
CUADRO
COMPARATIVO DE DEFINICIONES DE TRATA Y TRÁFICO
TRATA
DE PERSONAS
|
TRÁFICO
ILÍCITO DE MIGRANTES
|
Ø Reclutamiento.
Ø Existe engaño y amenazas.
Ø Consentimiento viciado.
Ø Se da dentro o fuera del país.
Ø No se cruzan las fronteras necesariamente.
Ø No se requiere dinero para el traslado.
Ø Muchas veces el tratante paga el viaje y luego le
cobra a su víctima.
Ø Se genera una deuda, factor utilizado como una
forma de sometimiento.
Ø La relación con la víctima es continua.
Ø El destino del traslado es el inicio de la
explotación.
Ø Las víctimas son principalmente mujeres, niñas y
niños.
Ø No corren riesgos durante el traslado.
Ø Es durante la explotación que peligran física,
psicológica y emocionalmente.
Ø Es un delito contra la dignidad y los derechos
humanos de la persona.
|
Ø El
migrante establece contacto directo y voluntario con el traficante (pollero o
coyote).
Ø No hay
vicio en el consentimiento.
Ø Se
inicia en condiciones de peligrosidad.
Ø Implica
cruce físico de una o más fronteras.
Ø El
dinero es un factor intrínseco en el traslado.
Ø La
relación entre el traficante y el migrante termina una vez llegado a su
destino.
Ø Su vida
corre riesgo durante el traslado.
Ø Uso y
falsificación de documentos (pasaporte, visa).
Ø Es un
delito contra las leyes migratorias.
|
Fuente: OIM
En el cuadro anterior se puede destacar que
trata y tráfico son fenómenos de distinta naturaleza, aunque ambos sean
producto de la pobreza y mantengan rasgos análogos uno atenta directamente
contra la vida, que es un derecho humano y el otro simplemente a las leyes
migratorias. En ese sentido con puede haber punto de relación, pues uno puede
acabaron la abolición de ciertas disposiciones migratorias y el otro es
inherente a la naturaleza misma del capitalismo.
1.3. Elementos
que definen a la Trata de Personas
1.3.1. Actividad
En este punto se describe y analiza las
actividades que realizan los tratantes para poder realizar el delito. Se puede
considerar, a los siguientes pasos a describir como las fases de la trata de
personas, porque constituyen pasos o procedimientos a los cuales recurren y uno
es dependiente del otro.
1.3.1.1. Captación
La captación es el paso inicial de la trata de
personas e implica la ubicación e identificación de la víctima, además de su reclutamiento por
distintos medios. Las organizaciones de trata de personas hacen expediciones de
campo para poder observar a las personas que se convertirán en sus víctimas.
Una vez ubicada una buena posibilidad, la identifican y la estudian al máximo
con tal de conocer sus debilidades.
La trata de personas involucra una población
vulnerable compuesta principalmente por niños, niñas y adolescentes. Esta
población se encuentra en un estado constante de peligro por su debilidad
física frente a los medios y mecanismos utilizados por los reclutadores o
captadores. Además de estar minados por el peligro del delito de la trata, esta
población se encuentra vulnerable en términos económicos debido a la pobreza de
las familias, de donde salen las víctimas.
Las técnicas utilizadas para captar personas
varían, en el caso de los niños, se puede utilizar el robo, la mentira o el
engaño. El ofrecimiento de dinero, la tentación con regalos suelen ser
mecanismos recurrentes para los reclutadores. Esto solo es posible debido al
grado de ingenuidad por el que atraviesan necesariamente todos los niños.
La pobreza de las familias es uno de los
factores en los que se apoyan los tratantes para realizar trataos directos con
los padres de familia quienes venden a cambio de fuertes sumas de dinero a sus
propios hijos. Esto no sería explicable si la familia tuviera los recursos
necesarios para poder vivir en condiciones aceptables. Las madres, o los
padres—en la mayoría de los casos alcohólicos o drogadictos—por las condiciones
de vida y los problemas que atraviesan se ven obligados a deshacerse de la
responsabilidad que implica un niño.
Para la captación de las adolescentes o de las
mujeres, las redes de tráfico han logrado montar empresas de trabajo para
migrantes o si la finalidad es la explotación sexual comercial se han puesto en
pié empresas de belleza donde las jovencitas, con falsas esperanzas son
reclutadas para convertirlas en mercancías de goce y disfrute. Las empresas
corren con todos los gastos de transporte, que posteriormente se convierte en
un arma de chantaje porque las personas tratadas son obligadas a trabajar sexualmente
hasta que el total del dinero quede cancelado.
1.3.1.2. Traslado
El traslado es la segunda fase de la trata de
personas que consiste en el movimiento o desplazamiento d las víctimas. Este
desplazamiento se puede dar por medios terrestres tal como los ferrocarriles,
los viajes por automóviles o en conteiner donde existen grandes posibilidades
de ocultar a las personas, acuñando a la entrada de los vagones mercancías
varias. De modo que las personas no sean encontradas en caso de alguna
requisa. El desplazamiento puede ser por
vía marítima en barcos, e igual las personas tratadas viajan en conteiner o
bien puede suceder que el desplazamiento sea por vía aérea, en este caso, se
supone que se ha procedido a la falsificación de documentos, o la víctima a
realizado los trámites necesarios, sin embargo bajo la idea de que conseguirá
mejores condiciones de vida.
Se debe diferenciar entre el lugar de origen,
el lugar de tránsito y el lugar de destino. El lugar de origen es donde se ha
procedido a captar, reclutar a la víctima, siendo estos lugares o países,
generalmente pobres. El lugar de tránsito es el circuito que debe atravesarse
para llegar al lugar de destino. Cuando se da trata con fines de explotación
sexual comercial, la víctima suele ser abusada y violada constantemente en el
trayecto por los captores. En muchos casos esta práctica sirve también como
soborno a los policías, quienes dejan pasar a las víctimas y el transportista
por abusar sexualmente de ellas. Finalmente está el lugar de destino que es
donde la víctima es explotada. Estos tres lugares constituyen el recorrido de
los tratantes y se encuentran en relación directa con las fases de la trata de
personas.
1.3.1.3. Recepción
El lugar de recepción, que la última fase de la trata de personas constituye el
momento y lugar donde comienza la explotación de la persona. Desde que la
persona es recibida, los tratantes comienzan a explotarla de distinta manera
conforme las finalidades de los tratantes, puede ser laboralmente, o en la
explotación sexual comercial de niños, niñas y adolescentes o la prostitución.
Las víctimas se encuentran aisladas de la sociedad y su único vínculo es el de
su verdugo y la persona que va a comprar sus utilidades.
Los lugares de recepción son instalaciones
donde las personas tratadas pasan varios años de su vida bajo el poder de la
organización o el tratante. Las condiciones de vida son muy duras, ya que viven
colectivamente con otras víctimas del mismo delito y porque la alimentación, el
aseo y la vestimenta es un factor muy difícil de conseguir. Se han habilitado,
incluso, jaulas y condiciones para prácticamente recluir a las víctimas debido
a los constantes casos de fuga que los tratantes han vivido.
1.3.2. Medios
Los medios de los que el tratante se vale para
consumar la trata de personas son:
a) Amenaza.-
la víctima recibe amenazas contra la integridad de un ser querido que por lo
general es un miembro de su familia. Una vez en las manos del tratante que sabe
todos los detalles de la vida de sus víctimas, este utiliza una serie de
amenazas en contra de las personas, por quien sabe siente afecto. Para tener la
certeza de que se actuará en serio y la víctima creerá, el tratante mostrará
algunos datos como fotografías, número de años y lugares por los cuales
frecuenta la persona que la víctima aprecia o ama. En ese sentido se logra una
total sumisión.
b) Fuerza.-
este medio consiste en utilizar la violencia para someter a la víctima a una
total obediencia. Es el sufrimiento físico lo que obliga a la víctima a hacer
caso al tratante.
c) Fraude.-
se ofrece a la víctima mejores oportunidades de vida y de trabajo. Ésta—la
víctima—producto de sus necesidades económicas ve una buena oportunidad de
trabajo, para luego someterse voluntariamente
a las condiciones del tratante, hasta que llega al lugar de destino y se
encuentra con una realidad distinta a la prometida.
Hay mecanismos de control y legitimación que
los tratantes generan en sus víctimas. Uno de ellos es el endeudamiento. La
víctima ha constado una serie de recursos económicos para poder ser trasladada,
el hospedaje, etc. Entonces el tratante hace una cuenta descomunal la cual
comunica a su víctima que es deudora y él podrá utilizarla hasta que la cuenta
quede saldada. Un ejemplo ilustrativo al respecto nos lo presenta la obra de
“La Increíble y la Triste Historia de la Cándida Eréndida y su Abuela
Desalmada” de García Márquez donde la nieta (Eréndida) es tratada en la explotación
sexual comercial de niños por la propia abuela, después de que ésta primera se
endeudara producto de un incendio que destruyó la casa de la abuela por
descuido de la nieta al dejar una vela encendida. Este mecanismo está orientado
a generar una legitimación, pues la víctima en vano piensa que trabajando duro
en lo que le mande el tratante ésta podrá pagar su deuda y ser liberada. El
tratante busca enriquecerse a costa de su trabajo, y lo hará mientras la
persona le sea útil. El otro mecanismo utilizado es el secuestro de documentos,
la persona víctima queda sin dinero y sin papeles en un país ajeno y no le
queda otra que someterse a la voluntad del tratante. El tratante puede también
generar adicciones en la víctima y convertirla en drogadicta de modo que
obtendrá de ella obediencia absoluta mientras le siga suministrando las dosis
necesarias. La otra forma de legitimación de la explotación suele ser la
seducción, pues el tratante se hace pasar por amigo, amante de la víctima y
empieza a establecer vínculos afectivos, de modo que consigue, mediante la
manipulación de sentimientos la obediencia.
1.3.3. Fines
La trata de personas se realiza con una
finalidad muy clara, la explotación de
las personas. A pesar de que este rasgo es el objetivo de la trata, esto no
quiere decir que la explotación de las personas se dé solamente en el marco de
este delito. Sociológicamente hablando la explotación del hombre es un fenómeno
inherente al capitalismo como modo de producción de la sociedad moderna. El
rasgo que diferencia a la explotación de las personas dentro el delito de la
trata con la explotación que vive día a día un trabajador consiste en que la
persona tratada sufre con mayor intensidad esa explotación, y además, lo característico
es que se ve privada de su libertad individual para poder ser explotada donde
mejor le parezca. Esto lo define el tratante.
1.3.3.1 Explotación sexual
La explotación sexual es una de las razones
fuerza de la trata de personas, ya que la mayoría de las personas tratadas son
mujeres, niños, niñas y adolescentes. Este tipo de explotación consiste en la
obligación a tener relaciones o prácticas sexuales con personas ajenas a las
víctimas, las cuales abusan de ellas sexualmente. La explotación sexual incluye
hechos como la explotación de la prostitución ajena, la explotación sexual
comercial de niñas, niños y adolescentes y diversas formas de explotación como
la pornografía y el turismo sexual.
1.3.3.2.
Explotación Laboral-Trabajos o servicios forzados
Este concepto se puede discutir, en realidad la
explotación laboral en trabajos o servicios forzados existe sin la necesidad d
que las personas sean tratadas. Lo que lo diferencia, mencionamos hace un
momento es que la víctima se ve obligada involuntariamente a realizar dicho
trabajo bajo amenaza o algún mecanismo de coerción. “De la misma forma, se
entenderá por trabajo o servicio forzado el exigido a un individuo bajo la amenaza de una pena cualquiera y para
el cual dicho individuo no se ofrece “voluntariamente”, según aparece definido
en y por el Convenio 29 de la OIT.” (Ludena 2007: 15). La extracción de la
plusvalía d dicho trabajo es mayor que la de un simple trabajador, porque el
tratante puede alargar la jornada de trabajo e intensificar al mismo tiempo la
capacidad de producción de la víctima tratada. En el caso de los niños, éstos
se utilizan para la producción en la que es necesario ciertas condiciones como
poca estatura, manos pequeñas, dedos delgados para poder manipular los objetos.
La explotación laboral se puede dar en la agricultura,
la tala de maderas, la minería, las fábricas, los trabajos domésticos o el
reclutamiento forzoso con fines de actividad bélica.
1.3.3.3 Servidumbre
Dentro de esta forma de explotación puede estar
el matrimonio servil u otras formas de prestación de servicios que la víctima
puede otorgar al tratante o al cliente del tratante quien es la persona que
paga por la mercancía.
1.3.3.4 Extracción de órganos
El otro aspecto más oscuro de la trata de
personas es que se lucra con partes del cuerpo humano. La extracción de órganos
es un fenómeno muy reciente que ha podido avanzar conforme se ha perfeccionado
la técnica de los trasplantes. Sucede
que personas con recursos económicos se encuentran en un estado de salud muy
crítico debido al daño o padecimiento de alguna enfermedad por lo cual
necesitan de un órgano humano para poder vivir. Estas personas ofrecen
cuantiosas sumas de dinero por la obtención de un órgano, no importando su
proveniencia.
Al respecto del tráfico de órganos, muchas
versiones, sobre todo las que vienen de las fuentes médicas tratan de desmentir
la existencia de redes de tráfico de órganos, pues esto necesitaría de muchas
condiciones materiales para poder realizarse y es muy difícil que se practique.
Sin embargo, la realidad es más contundente que los intereses institucionales o
la imagen de determinado sector de profesionales. En china hay casos concretos
de prisioneros que de los cuales se extraen los órganos, para luego traficar
con ellos. El estado ha llegado a legalizar esta práctica.
Podríamos resumir en el siguiente esquema todo
lo afirmado anteriormente de la siguiente forma.
Las actividades, los medios y los fines de la
trata de personas están relacionados con las fases de la trata de personas. Todos
los elementos tanto en la captación, el traslado y el lugar de destino dependen
secuencial y jerárquicamente.
[1] El subrayado es mío.
[3] Protocolo contra el tráfico ilícito de
migrantes por tierra, mar ya aire, que complementa la Convención de las
Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional.
BIBLIOGRAFÍA
Ø CORTEZ, Dolores
2006 Definición E Importancia De La Conceptualización Del
Problema: Mecanismos Legales Disponibles Contra La Trata De Personas. OIM.
Documento Power Point.
Ø LUDENA,
Aida
2007 Módulo Conceptual Sobre la Trata de Personas.
OIM. La Paz.
Ø OIM,
Organización Internacional para las Migraciones
2008 La Trata de Personas en la Mira. Weinberg. La
Paz.
Ø CONVENCIÓN
DE LAS NACIONES UNIDAS CONTRA LA DELINCUENCIA ORGANIZADA TRANSNACIONAL. Protocolo contra el tráfico ilícito de
migrantes por tierra, mar ya aire, que complementa la
Ø UNICEF
2005 Contra la Trata de Niños, Niñas y Adolescentes.
Sadag. La Paz.
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